EJERCICIO DE OBSERVACION (realizado en un espacio público de Tunuyán)

Farmacia del Piave   (Calle San Martin)

A las 19:15hs del dia 2 de mayo de 2008 ingresé al lugar nombrado anteriormente, en el se obserba un clima de tranquilidad, todo muy limpio y ordenado, en el sitio había tres personas, dos de sexo femenino y uno masculino, al parecer este último era el dueño, pero los tres estaban dedicados a la atención al público, en el momento que ingresé al lugar habian dos señoras mayores las que estaban muy abrigadas, una de ellas de falda (A) y la otra de jean (B), estas estaban debatiendo sobre que blister de pastillas llevaban, ya que  las que habían solicitado no estaban en el local.

(B):"Rosa, llevá las diclofenac que son las mismas"

(C):’Si tienen la misma droga aunque no sea el mismo nombre’

(B):"las llevo!!!!"

Ambas señoras se acercaron a la caja registradora comentando la compra, pagan, se retiran del lugar saludando muy atentamente y agradeciendo a la farmacéutica la ayuda brindada.

Mientras ocurria la situación descripta anteriormente también en el lugar había una joven de aproximadamente 20 años observando una de las vitrinas (V´) que en su interior tenía maquillajes, labial, rimel, sombras, etc.., cuando fue su turno pidió que le muestren un estuche que sombras de variados tonos, la vendedora le sacó algunos, pero al verlos, noté que hizo un gesto (levantó las cejas y frunció la nariz)

(F):"No los colores son muy pasteles, yo soy más de los tonos llamativos.."

Se dio vuelta saludo y salió. Pude observar que la jóven lucía una calza color azul francia , bincha al tono y campera negra.

Al salir esta del lugar eran las 19:25hs y la farmacia quedo sin ningún cliente, solo se sentian murmullos de las personas que trabajan en el lugar, en ese momento una de las chicas que atendía salió a la vereda, despúes de unos segundos volvió a entrar; detrás de ella ingresa una una jóven de buen aspecto, cabello rubio y largo con un niño en sus brazoz tambien de aspecto limpio y bien vestido, el que de repente empezó a llorar, al parecer quería subir a la balanza del lugar, la jóven que aparentemente era la madre no lo dejaba, en tono silencioso lo retó y el niño dejó de llorar, cuando fue su turno pidió Benadril, la farmacéutica lo buscó, se lo entrego, esta le dijo el precio, la cliente pago y salio. desde mi observación esta joven no era muy simpática ya que sus gestos eran muy frios y serios.

Al terminar esta situación me retiré del lugar siendo las 19:33hs